Ayer nos aceptaron en la web http://mujeresconhabitacionpropia.com Nos ofrecieron una habitación en este sitio web para poder acomodar nuestro
blog. Estamos entusiasmadas y ayer mismo la ocupamos; ahora la iremos llenando
poco a poco de cachivaches. Os animo a que nos visitéis. A nosotras y a todas
nuestras vecinas. Es una maravilla de comunidad en la que hay mucho pero mucho
que aprender. Aquí tenemos la llave de nuestra flamante puerta.
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A mí me hace una ilusión especial
poder participar en esta página porque habla de mujeres, de creatividad y de
esfuerzos compartidos. Su creadora, Trini Moreno, está haciendo una estupenda labor ayudándonos a interactuar y a visibilizar nuestros propios espacios (los
de todas) en este mundo virtual en el que cada vez estamos más enredad@s. Los
espectaculares avances en nuevas tecnologías que se están produciendo en los
últimos años son los que me animaron a apoyar la idea de mis hijas de construir
este blog a tres manos. Hoy en día, aprender a navegar con soltura en familia
es un lujo que quiero disfrutar y compartir con mis niñas que cada vez lo son
menos.
Pero me hace especial ilusión porque
esta web bebe de Virginia Woolf y su novela “Una habitación propia”, metáfora de la necesaria libertad personal,
física y económica de las mujeres para poder ser auténticos sujetos creadores,
visibles en el ámbito público como lo han sido siempre en el privado.
No os creáis tampoco que me chupo el
dedo: soy absolutamente consciente de que mientras para mí son tan importantes
estos conceptos de Woolf, el único Wolf válido para mis hijas es Jacob, el lobo
de la saga “Crepúsculo”. Cuando
Taylor Lautner se quita su camiseta ya todo lo demás les importa más bien poco.
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