Sigo manteniendo el proyecto 30 y ya van 7 meses o, lo que es lo mismo, 214 días, que ahí es nada. Lo que no llevo tan bien es lo de publicar los collages mensuales. Hoy estamos a 11 de enero y me acabo de acordar que no había publicado aun el del mes de diciembre.
Me he puesto a la tarea de revisar las fotos que hice cada día del mes de diciembre para elegir una de tantas. Y digo una de tantas porque la "obligación que me he impuesto" es hacer, al menos, una foto al día; pero la verdad es que en el mes de diciembre he hecho muchas muchas muchas más.
Miro las fotos y veo que diciembre ha sido un mes sencillamente increíble.
Me encanta lo de hacer un diario gráfico de la vida. Miras atrás y piensas que cada proyecto se va colocando en su sitio, que la vida es brillante, que los sueños se cumplen, que diciembre ha sido el mes de París, la familia, la presentación de mi primera novela, "La proposición de Carola", el mes de las navidades, los niños, las celebraciones que dan un poco de nostalgia pero, a la vez, te hacen pensar que estamos juntos, que tenemos mucha suerte, que no puedo dejar de dar las gracias por todo, que se ha acabado un año, el 2014, y que en el 2015 tendremos que seguir soñando, que seguir esforzándonos, que seguir creyendo, aprendiendo, creando, riendo, amando, disfrutando...
Que tendremos que seguir siendo nosotros mismos (sea eso lo que sea, que nunca me queda claro del todo porque creo que tampoco hay ninguna otra forma de poder ser), disfrutando de los momentos felices con los puños cerrados y sin dejarnos colonizar por la desesperanza. Creyendo que, como decía Peter Pan en esa peli que durante las navidades hemos visto varias veces porque es la favorita de los niños...
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